CASO MAFALDA SÁNCHEZ
La Justicia lo desvinculó de un homicidio pero su vida igual cambió: “Mi nombre se ensució, la gente me da vuelta la cara y no consigo trabajo”
Las declaraciones son de Daniel Rivarola, uno de los dos implicados por el crimen de Mafalda Sánchez. “Se comprobó mi inocencia”, dijo al final de la audiencia donde ordenaron el sobreseimiento.
Este viernes Jorge Daniel Rivarola quedó desvinculado del crimen de Mafalda Sánchez. En una audiencia de control de acusación, el juez Santiago Ortiz dispuso el sobreseimiento.
Cuando comprobaron (a través de una cámara) que en el momento que mataron a la vecina del barrio La Rioja, él estaba en otro lugar, lo dejaron en libertad, pero seguía siendo investigado. Ahora eso se terminó.
Desde entonces perdió su empleo en una empresa constructora y nunca más pudo encaminar su vida porque el destino quiso cambiarlo todo.
“Mi cara, mi nombre y apellido se ensució por todos lados y la gente ahora por más que se me haya demostrado mi inocencia, me da vuelta la cara y no consigo trabajo”, dijo en declaraciones a El Chorrillero.
Sobrevive de la venta de churros que hace con su esposa.
Guillermo Páez, que su cuñado, quedó imputado por el delito de homicidio en ocasión de robo y seguirá preso en el Servicio Penitenciario Provincial al menos hasta la realización del juicio.
El día que ambos fueron detenidos, la familia de Rivarola sostuvo que "habían agarrado a un perejil", hicieron marchas y juntaron evidencias para demostrar que era inocente.
“Están buscando algo, una traba como para retenerlo porque no encuentran los verdaderos culpables. No tienen nada en contra de él, más los resultados de ADN que se conocieron ahora y que no coinciden con los de nosotros”, concluyó.